Redaccion
La presentación de la Operación Asfalto 2025-2027 en Alcobendas marca el inicio de un ambicioso proyecto que se llevará a cabo en los próximos tres años, con una inversión total de ocho millones de euros y un área afectada de 600.000 metros cuadrados distribuidos entre los distritos Norte, Centro, Urbanizaciones y Empresarial.
La alcaldesa, Rocío García Alcántara, ha enfatizado que «la operación asfalto se llevará a cabo de manera planificada para minimizar el impacto en el tráfico y evitar molestias a nuestros vecinos».
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En la presentación estuvo presente Miguel Ángel García Martín, consejero de Presidencia, Justicia y Administración Local de la Comunidad de Madrid, entidad que financia seis millones de esta Operación Asfalto en la ciudad a través de su Programa de Inversión Regional (PIR) 2022-2026.
El consejero ha resaltado la importancia de Alcobendas en el corredor norte, siendo actualmente «uno de los principales activos económicos de la región gracias a su inversión en infraestructuras y su alto desarrollo empresarial».
Fase I en ejecución
La presentación tuvo lugar cerca del aparcamiento de la estación Valdelasfuentes de Cercanías Renfe, donde ya han comenzado los trabajos de la Fase I, que durará tres meses, abarcando un área de 115.704,40 metros cuadrados distribuidos en 27 vías de los cuatro distritos, incluyendo la calle Marqués de la Valdavia, la Avenida de la Industria, la vía de servicio de la carretera de Fuencarral y la calle Azalea. En esta primera fase, se invertirán 1.625.030,00 euros.
La operación asfalto constará de cuatro fases en total, con la segunda comenzando a finales del verano o principios del otoño, la tercera a mediados de 2026 y una posible cuarta fase durante 2027.
Apuesta por la sostenibilidad
Los trabajos de la operación asfalto incluyen fresado, reparación estructural del firme, sellado de fisuras, saneamiento de raíces y reposición de bordillos y mobiliario urbano, además de ajustes en tapas de registros y sumideros.
Tanto la Comunidad de Madrid como el ayuntamiento han optado por una mezcla de materiales con menor impacto en la huella de carbono y, por lo tanto, una reducción de los gases de efecto invernadero. Además, con las nuevas capas de asfalto, se reducirá el ruido del tráfico, mejorando la calidad de vida de los residentes al disminuir la contaminación acústica.
