La alcaldesa de Alcorcón, Candelaria Testa, ha anunciado su compromiso de abordar la burbuja inmobiliaria en el Ensanche Sur mediante la aplicación del derecho de tanteo y retracto. Esta medida tiene como objetivo garantizar la protección pública, y se llevará a cabo tras la adquisición de los activos y pasivos de la Empresa Municipal de Gestión Inmobiliaria (Emgiasa).
En 2019 se inició un proceso para recuperar el patrimonio de la empresa municipal, el cual se vio afectado por un concurso voluntario de acreedores y la progresiva pérdida de activos durante los Gobiernos del Partido Popular.
En 2023, el ayuntamiento logró adquirir tanto los activos como los pasivos de la empresa, lo que le permite aplicar la ley de tanteo y retracto. Esto significa que, cuando un propietario decida vender una vivienda en el Ensanche Sur, el Ayuntamiento tiene el derecho de adquirirla para evitar que salga del régimen de protección.
Esta medida busca asegurar el acceso a viviendas protegidas a precios tasados y asequibles, alejados de los valores inaccesibles del mercado actual, según explicó la alcaldesa.
Además, se han implementado otras acciones como la revisión del Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) y el impulso del barrio de Retamar. En este último, se colocó la primera piedra de un desarrollo que contará con 3.500 viviendas, incluyendo 1.123 públicas promovidas por el Ayuntamiento y más de 200 impulsadas por el Gobierno de España a través del SEPES del Ministerio de Vivienda.
Pedro Sánchez, presidente del Gobierno, y la ministra de Vivienda y Agenda Urbana, Isabel Rodríguez, participaron en el evento, destacando la importancia de promover hogares accesibles para todos. El barrio de Retamar se proyecta como un espacio verde, sostenible, bien comunicado y con un enfoque feminista, donde una de las calles principales llevará el nombre de la alcorconera Pilar Peña, capitana de la selección española de waterpolo.
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