En el corazón industrial de Madrid, se encuentra la fábrica de El Águila en San Sebastián de los Reyes, la última instalación de producción industrial de cerveza en la capital. Con una tradición de 125 años, esta fábrica combina la historia con la tecnología para crear una de las cervezas más emblemáticas de la ciudad.
El maestro cervecero Pablo Ruíz nos lleva en un recorrido por la planta, explicando que la receta secreta se basa en cuatro elementos fundamentales. La malta de cebada y la malta caramelo, el agua de Madrid, el lúpulo de León y la levadura original de la casa son los ingredientes clave que dan vida a esta cerveza única.
El proceso de elaboración es un ballet de precisión, desde la molienda de la malta en los molinos hasta la fermentación en los tanques, donde la magia sucede. Con una producción diaria de 600.000 litros de cerveza, cada paso es crucial para garantizar la calidad del producto final.
La cerveza de Madrid encuentra su maridaje perfecto en eventos como Tapapiés, donde 92 tapas se combinan con esta cerveza madrileña en un festín de sabores. La sinergia entre las tapas más castizas y la cerveza local es evidente, creando una experiencia gastronómica única que resalta lo mejor de la cultura culinaria de la ciudad.
FUENTE













Deja una respuesta