En la calle de San Hermenegildo, peatones y vehículos comparten el mismo espacio a nivel de la vía. Para garantizar la seguridad, se instalaron bolardos en lugar de vallas o aceras. Sin embargo, estos bolardos suelen terminar en el suelo debido al paso constante de los coches, especialmente en una calle tan estrecha como esta.
Los residentes y conductores han expresado su preocupación por los daños causados en los bajos de los vehículos y han pedido soluciones a las autoridades locales. El consistorio está evaluando posibles medidas para mejorar el acceso a esta calle y evitar futuros incidentes.
En una reciente denuncia, se ha destacado que las aceras de la zona son estrechas e inseguras, lo que agrava la situación. Es fundamental encontrar una solución que garantice la seguridad de todos los usuarios de la vía y evite posibles accidentes.
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